miércoles, 20 de octubre de 2010

Un ejemplo de la devoción

Un ejemplo de la devoción

Insto a que la comunión con Cristo una comunión cada vez mayor. Hay cortinas para ser hecho a un lado en Cristo que nunca vimos, y el plegamiento del nuevo del amor en él. Me desespero que yo jamás ganar hasta el final de ese amor, hay muchas capas en el mismo. Por lo tanto cavar hondo, y el sudor y el trabajo y se esfuerzan por él, y establecido por el tiempo que en el día para lo que pueda. Vamos a ganar en el Rutherford labor.-Samuel

Dios tiene ahora, y ha tenido, muchos de ellos dedicados, los predicadores de oración, el hombre en cuya vida de oración ha sido una poderosa fuerza de control, visible. El mundo se ha sentido su poder, Dios se sintió y se ha honrado su poder, la causa de Dios se ha movido poderosamente y rápidamente con su oración, la santidad ha brillado en sus personajes con un resplandor divino.

Dios que se encuentra uno de los hombres que buscaba en David Brainerd, cuya obra y nombre han pasado a la historia. No era un hombre ordinario, pero era capaz de brillar en cualquier empresa, el interlocutor de los sabios y dotados, eminentemente capacitado para ocupar los púlpitos más atractivos y de trabajo entre los más refinados y lo culto, que estaban tan ansiosos de seguridad por su pastor. Presidente Edwards es un testimonio de que era "un joven de talento distingushed, tenía un conocimiento extraordinario de los hombres y las cosas, había raros poderes de conversación, destacó en su conocimiento de la teología, y era verdad, para alguien tan joven, una divina extraordinaria, y especialmente en todos los asuntos relacionados con la religión experimental. Nunca supe su igual de su edad y que presentan las nociones claras y precisas de la naturaleza y la esencia de la verdadera religión. Su actitud en la oración era casi inimitable, como tengo muy raras veces se conoce igualado. Su aprendizaje fue muy considerable, y tenía dotes extraordinarias para el púlpito. "

Ninguna historia sublime se ha registrado en los anales de tierra que la de David Brainerd, ningún milagro atestigua con fuerza adivino la verdad del cristianismo de la vida y obra de un hombre. Solo en el salvaje salvaje de América, luchando día y noche con una enfermedad mortal, sin educación en el cuidado de las almas, que tienen acceso a los indios por una gran parte del tiempo sólo a través del medio torpe de un intérprete pagana, con la Palabra de Dios en su corazón y en la mano, disparó su alma con la llama divina, un lugar y tiempo para derramar su alma a Dios en oración, constituido íntegramente el culto de Dios y garantizados todos sus resultados de gracia. Los indios fueron cambiados con un gran cambio desde la más baja besotments de un paganismo ignorante y degradado a puro, cristianos devotos, inteligente, todos los vicios reforma, las funciones externas del cristianismo a la vez se abrazaron y actuado en, la oración familiar establecido, el día de reposo instituido y religiosamente observada, las gracias internos de la religión exhibidas con creciente dulzura y fuerza. La solución de estos resultados se encuentra en el propio David Brainerd, no en las condiciones o los accidentes, sino en el hombre Brainerd. Era un hombre de Dios, porque Dios primero y el último y todo el tiempo. Dios puede fluir sin obstáculos a través de él. La omnipotencia de la gracia fue detenido ni se enderezó por las condiciones de su corazón, todo el canal ampliado era y limpiado para el paso de mayor y más poderosa de Dios, para que Dios con todas sus fuerzas poderosas podría venir abajo en el desierto sin esperanza, salvaje, y transformarlo en su jardín en flor y fructífera, porque nada es demasiado difícil para Dios hacer en caso de que pueda obtener el tipo correcto de un hombre a quien hacerlo.

Brainerd vivió la vida de santidad y oración. Su diario está lleno y monótono con el registro de sus temporadas de ayuno, la meditación, y la jubilación. El tiempo que pasó en la oración privada ascendió a muchas horas diarias. "Cuando vuelvo a casa", dijo, "y me entrego a la meditación, la oración y el ayuno, mi alma te busca a la mortificación, la abnegación, la humildad y repudio de todas las cosas del mundo." "No tengo nada que hacer , "dijo," con la tierra, pero sólo con el trabajo en su verdad de Dios. Yo no deseo de vivir un minuto para que todo lo que la tierra puede permitirse "Después de esta orden de alto hizo rogar:". Sintiéndose algo de la dulzura de la comunión con Dios y la fuerza coactiva de su amor, y cómo admirable que cautiva el alma y el hace que todos los deseos y los afectos del centro en Dios, que distinguen este día para el ayuno y la oración secreta, para rogar a Dios que me bendiga y directa en relación con el gran trabajo que tengo en vista de la predicación del evangelio, y que el Señor volvería a mí y me muestran la luz de su rostro. Tenía poco de vida y poder en la mañana. Cerca de la mitad de la tarde Dios me ha permitido luchar ardientemente en intercesión por mis amigos ausentes, pero sólo en la noche el Señor me visitó maravillosamente en la oración. Creo que mi alma nunca estuvo en tal agonía antes. No sentí ninguna restricción, por los tesoros de la gracia divina se abrieron para mí. Luché para los amigos ausentes, para la cosecha de almas, por las multitudes de pobres almas, y para muchos que pensaban que eran los hijos de Dios, personalmente, en muchos lugares distantes. Yo estaba en tal agonía del sol de media hora de alta hasta la noche cerca que estaba todo mojado de sudor, pero sin embargo me pareció que no había hecho nada. ¡Oh, mi amado Salvador hizo sudar sangre para las pobres almas! Yo deseaba más compasión hacia ellos. Me sentía aún en un marco de dulce, con un sentido del amor divino y la gracia, y se fue a la cama de tal marco, con mi corazón puesto en Dios. "Fue la oración la que dio a su vida y ministerio de su maravilloso poder.

Los hombres de oración poderosa son hombres de fuerza espiritual. Oraciones nunca mueren. toda la vida de Brainerd fue una vida de oración. De día y de noche oraba. Antes de la predicación y después de predicar oraba. Cabalgando por las soledades de los bosques interminables oró. En su lecho de paja oró. De retirarse a los bosques densos y solitario, oró. Hora tras hora, día tras día, mañana temprano y tarde en la noche, estaba orando y ayunando, derramando su alma, intercediendo, en comunión con Dios. Él estaba con Dios poderosamente en la oración, y Dios estaba con él poderosamente, y por él muerto, aún habla y obra, y hablar voluntad y el trabajo hasta que llegue el fin, y entre los de los gloriosos de ese glorioso día estará con la primera.

Jonathan Edwards dice de él: "Su vida muestra el camino correcto hacia el éxito en la obra del ministerio. Él buscaba como el soldado busca la victoria en un sitio o batalla, o como un hombre que corre una carrera por un gran premio. Animado por el amor a Cristo ya las almas, cómo lo hizo la mano de obra? Siempre con fervor. No sólo en la palabra y la doctrina, en público y en privado, pero en las oraciones de día y de noche, luchando con Dios en secreto y con dolores de parto con gemidos indecibles y agonías, hasta que Cristo se formó en los corazones de las personas a las que se enviado. Como un verdadero hijo de Jacob, perseveró en la lucha libre a través de toda la oscuridad de la noche, hasta la última hora del día! "

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